jueves, 22 de julio de 2010

capitulo 25



Álex mira abatido a un ansioso Marcos.

--porque has hecho esto?
A Marcos le duele su tristeza. Lo acaricia:
--No creo que ser un hombre rico sea para ponerse tan triste...
Álex tira los papeles.
--son copias... ya todo está hecho...
Álex se lleva las manos a la cabeza. Está muy alterado:
--¡¡no sabes lo que has hecho...¡
Marcos le acaricia:
--claro que sí... es nuestro futuro... ahora estaremos siempre juntos...
Álex le tira patadas a los papeles:
--¿¿¡y así quieres conseguir el amor?¡
--Tú me lo dijiste... me dijiste que sólo así te ibas a librar de ese maldito hechizo...
Álex se calma. Le pone la mano en las mejillas:
--¿¿y tú me creíste??
--claro, porque me ibas a mentir...
Álex le sonríe con tristeza:
--no lo ibas a entender...
Álex le da la espalda. Marcos le mira con deseo y con ternura.
--Álex...
Marcos le habla con dulzura. Álex siente pena de él pero no le dice nada. Marcos le agarra de la mano:
--lo hice por ti... No para que te sientas mal...
Álex se gira y lo mira abatido:
--¿¿qué quieres de mi?
--que nos amemos...
Álex le acaricia la mejilla:
--no me puedes obligar...
--pero en las noches...
Álex no le deja que siga. Le pone las manos en los labios y le dice:
--debes entender que esto que has hecho no es normal... Nadie regala un imperio a alguien porque sí...
--porque sí no... tú me has dado el amor... Ha sido porque sin ti me quería morir.
--no hables así... no hables de morir...
--¿porqué? Era lo único que quería hasta conocerte a ti...
Álex se sienta en la cama, le agarra de la mano y lo invita a sentarse con él.
--no me conoces... ¿o es que ha habido algo más que sexo?
Marcos no dice nada, pero agacha la cabeza con vergüenza.
--¿lo ves? --dice Álex.
Marcos levanta la mirada. Le acaricia la mejilla:
--es cierto... me encanta coger contigo pero no es solo eso...
Álex sólo cree que para Marcos es un capricho pasajero y no entiende que le haya dado todo su dinero.
--me he enamorado de tu mirada... esa mirada que en la noche no tienes...
Álex traga saliva. Tiene que hacer un esfuerzo para que no se le escape las lágrimas. Le conmueve que Marcos haya notado la diferencia entre el día y la noche. Le sabe aún peor lastimarlo. Agarra los documentos que están por el piso. Su culo en pompa llena de deseo a Marcos. Desearía pellizcarlo pero es más fuerte la ternura que está sintiendo. Álex le entrega los papeles. En cuclillas frente a él le dice:
--yo no puedo aceptar esto...
--ya lo has hecho... --dice Marcos con una tímida sonrisa.
--te lo devuelvo... --sentencia Álex seguro.
Marcos le sonríe y le dice:
--no lo quiero... tu veras lo que haces pero mi padrastro, yo y su familia dependemos de ti...
Álex se lleva las manos a la cabeza:
--¿¿qué quieres de mí?
--que te dejes amar...
Álex lo abraza. Marcos se aferra a él con desesperación:
--vamos a estar siempre juntos... vamos a ser tan felices...
Álex llora y dice para sí:
--me la jugaste, Octavio...
Su otro yo lo ha metido en una situación de la que no sabe cómo salir.















Como todas las mañanas, Eugenia entra en el cuarto de Axel mientras éste se está duchando. Ella lo desea tanto, se acerca peligrosamente pegando su cuerpo a la puerta entreabierta. Axel oye sus jadeos. Aunque Eugenia trata de huir él se cubre con una toalla y la atrapa.
--¡¡déjame, bruto¡ --grita ella mientras él la agarra del brazo.
--¿¿qué haces aquí?
Él la mira seductor. Ella siente rabia de haber sido descubierta.
--¡¡déjame maldito¡¡ ¡les diré a todos que me quieres violar...¡
Axel sonríe:
--¿¿y cómo vas a justificar que me estabas espiando en la ducha??
--¡¡yo no hacía eso... ¡¡que más quisieras tú¡¡
A él la situación le divierta.
--¿¿y qué hacías?
Axel sonríe porque por primera vez ha dejado sin palabras a la esposa de su padre y es que la verdad no tiene defensa. Ella lo sabe y por eso siente rabia. Por eso él se aprovecha:
--¿¿es que me quieres ver en pelotas? ¿¿qué clase de mujer eres tú? ¡¡eres una cualquiera¡
Aunque la ofende, a Axel lo llena de orgullo darse cuenta que a la mujer de su padre le gusta su cuerpo. Ella siempre lo había despreciado haciéndole sentir que vale menos que su hermano pero ahora él se da cuenta que le resulta atractivo. La mira con cara de depravado. Ella no quiere descubrir sus sentimientos y le dice con mucho desprecio:
--¡¡ya te gustaría acostarte conmigo...¡¡
A él le duele el desprecio de ella. Tampoco quiere que lo vuelva a humillar. Con el mismo desprecio con el que ella le habla él le dice:
--¡¡jamás me acostaría con una puta ni que fueras la ultima mujer del mundo¡¡ ¿¿¡te has mirado al espejo? ¡¡ya no excitas a nadie...¡¡¡Demasiado usada’
Muy herida en su orgullo de hembra, Eugenia se le tira encima. Le saca la toalla y le estruja el pene. El uno se funden en brazos del otro. Ambos hacen el amor con pasión y con delicadeza. Están en shock felices por la unión, por haber saboreado el cuerpo del otro. Eugenia con orgullo de haber seducido a ese chico que tanto le gusta dice:
--y ahora qué...?
Axel cree que para Eugenia sólo ha sido un desafío y molesto le reprocha:
--sólo ha sido sexo para ti ¿no...?
Eugenia lo mira, a sus 18 años lo ve tan joven, tan tierno. Sabe que él tarde o temprano se cansará de ella y no quiere recibir esta humillación.
---claro... ¿¿¡qué si no?
--¡¡eres una zorra...¡¡
Él llora porque la ama...
--¡¡me das asco¡ --dice él.
A ella le duelen mucho las palabras de él así que los dos juegan a ver quien se humilla más:
--¡¡has abusado de mí... eres el peor amante que he tenido y mira que he tenido miles...¡¡
--¡¡Eres más puta de lo que pensé, solo una gran puta se acuesta con los dos hijos de su marido...¡
Aunque dolida, Eugenia finge risa:
--¿¿a los 3 minutos que has durado lo llamas acostarse...?? ¡¡por favor...¡¡ para que tienes esa artillería si no la sabes usar...?? --dice ella estrujándole los genitales-- ¿eres maricon o eras virgen?
--¡¡maldita puta...¡¡ --muy herido.
--¡¡maricón...¡¡
las palabras de la mujer lo ofenden mucho.
--¡¡yo soy muy macho¡ --ofendido en su orgullo de hombre.
--pues no se ha notado --con burla.
--¡¡lo que pasa es que con una golfa que apesta a demasiados hombres como tú gracias que se me ha levantado... a mi me gustas las mujeres sin tanto viaje... esas sí me la ponen gorda y no se me baja... ¡¡contigo ya es muy difícil de excitarse... solo un viejo como mi padre...¡
Ella lo bofetea. Le ha dado dónde más la lastima. A los dos les duele ofenderse...

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